En la actualidad, los avances en cirugía estética han permitido la obtención de mejores resultados con muchos menos riesgos significativos para el paciente. Métodos como los hilos tensores se caracterizan por su baja propensión a las complicaciones y sin embargo, incluso ellos presentan algunas contraindicaciones.
Los hilos tensores actúan sobre la flacidez de la piel, pero no sobe las arrugas, las manchas u otros problemas relacionados con la edad.
Toda intervención quirúrgica, por poco invasiva que sea, tiene sus peligros. Por ello, solo debemos tratarnos con médicos especialistas que conozcan las posibles complicaciones o contraindicaciones que podemos presentar durante el uso de hilos tensores.
¿En qué casos no está indicado usar hilos tensores en el rostro?
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Los hilos tensores están hechos con un material biocompatible que, por lo general, no presenta reacciones adversas en el organismo. Los pacientes que se someten a esta práctica deben preocuparse muy poco por un rechazo del propio organismo.
En contraparte, de lo que si deben preocuparse es por las posibilidades de inflamación, infección o desarrollo de cicatriz queloidea.
¿Qué contraindicaciones existen para ponerse hilos tensores en los glúteos?
Como se mencionó con anterioridad, los riesgos de los hilos tensores en los glúteos tienen muy pocas situaciones de riesgo por ser un tratamiento, en esencia, poco invasivo. La intervención dura alrededor de 45 minutos y requiere de 3 días de recuperación como mínimo.
Los únicos riesgos verdaderos son las posibles infecciones o inflamaciones, y ambos son escenarios que se pueden evadir con facilidad siguiendo las normas sanitarias de forma estricta.
Sin embargo, algo que si se advierte a quienes se someten a este proceso en sus glúteos, es reducir durante el reposo todo tipo de actividad física o de ejercicio. No acatar este requisito podría causar una inflamación innecesaria y reducir los efectos deseados.
Contraindicaciones que podemos encontrarnos con los hilos tensores
A modo de resumen podemos afirmar que los hilos tensores, al ser un tratamiento poco invasivo y de bajo riesgo, son un procedimiento que posee escasos efectos secundarios y complicaciones. Esto se debe principalmente a dos factores, la técnica y el material utilizado.
La técnica debe dominarse por quien la aplica, por lo que solo debes asistir con médicos capacitados para aplicarla. No obstante, se trata de una técnica simple que, por su naturaleza, implica poco dolor y daño al paciente.
Si los hilos tensores están mal puestos tienes que tener una serie de precauciones y consideraciones a tener en cuenta.
Conclusión
Toda persona que desee realizarse un tratamiento de este tipo debe estar consciente de sus peligros y beneficios. Esto implica conocer tanto los aspectos ventajosos en comparación con otras intervenciones quirúrgicas como las posibles complicaciones, por menores que sean, que pueden presentarse en la inserción de hilos tensores.
Peligro de los hilos tensores
Para evitar cualquier peligro le recomendamos solicitar información detallada en el centro médico en el cual desee realizar la intervención y, de ser posible, comprobar los antecedentes y condiciones de salubridad del centro médico o clínica en cuestión.
Una vez que haya comprobado que todo está en orden tan solo le resta cumplir con las indicaciones cabalmente lo cual incluye las indicaciones de reposo. Cumplir con este último es muy importante, dado que solo el mismo garantiza la fijación de los efectos a largo plazo.